ACABE Guipúzcoa atendió el año pasado 77 nuevos casos de afectados por trastornos alimentarios. La mayoría fueron mujeres, con una edad media de 23 años. La asociación subrayó que las conductas de riesgo están aumentando y que el peligro es creciente. Maite Agirre explicó que perciben que “cada vez se detectan menos casos de anorexia nerviosa y más de bulimia nerviosa” y subrayó que muchos afectados acuden a ellos “cuando han transcurrido tres años o, incluso, una década desde que se inició la enfermedad”. Esto es, precisamente, lo que quieren evitar, de forma que la presidenta de ACABE Guipúzcoa consideró que “los farmacéuticos guipuzcoanos pueden contribuir a ello”.
Por su parte, Ángel Garay destacó que los farmacéuticos son unos “profesionales sanitarios muy cercanos al ciudadano”, por lo que deben “aprovechar esta condición para informar, orientar y derivar a aquellas personas afectadas por trastornos alimentarios o, incluso, atender las dudas de sus familiares”. La firma del acuerdo de colaboración se enmarca en la filosofía del COFG de colaborar con la Administración sanitaria, instituciones y otras entidades en el logro de intereses comunes y, en particular, en procurar una adecuada asistencia farmacéutica para los usuarios. FV
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