MartiDerm ha alcanzado un nuevo hito en su trayectoria al superar los 300 millones de ampollas vendidas en todo el mundo, consolidando su posición como uno de los laboratorios de referencia en el ámbito de la dermocosmética internacional. Este logro refleja más de siete décadas de trabajo centrado en la investigación, la innovación y la eficacia clínica.
Fundada en 1952 en la Farmacia Martí Tor de Barcelona, la compañía mantiene su propósito original: desarrollar fórmulas de alta eficacia para mejorar la salud de la piel. En 1989, MartiDerm transformó el mercado dermocosmético con la creación de una fórmula capaz de preservar las propiedades de la vitamina C y los proteoglicanos, origen de las primeras ampollas faciales.
El laboratorio ha basado su evolución en lo que denomina La Fórmula, una combinación de ciencia, rigor e innovación aplicada al cuidado de la piel. Este enfoque ha permitido a MartiDerm ser pionera en la realización de estudios clínicos en dermocosmética, reforzando su reputación entre médicos, farmacéuticos y consumidores.
Según explica Montse Martí, CEO y miembro del consejo de administración de MartiDerm, “estamos inmersos en un proceso apasionante que parte de la fortaleza de nuestra historia y mira hacia el futuro con ambición y foco: consolidar la ciencia que nos ha traído hasta aquí, apostando por la innovación y estando cada vez más cerca de profesionales y consumidores”.
Actualmente, la compañía vive una etapa de crecimiento internacional sostenido. Cerca del 50 % de su facturación procede de los mercados exteriores, con una presencia consolidada en España, Portugal, México, Italia y Francia, y una expansión progresiva en Europa, Asia y Latinoamérica. Este crecimiento se apoya en la farmacia como socio estratégico y en una adaptación constante a las particularidades de cada mercado.
De cara al futuro, MartiDerm continuará reforzando su liderazgo en innovación y ciencia, manteniendo su compromiso con la sostenibilidad como parte esencial de su modelo de negocio. Entre sus objetivos se encuentra seguir reduciendo la huella de carbono y el impacto ambiental de sus operaciones, bajo la convicción de que cuidar la piel implica también cuidar el planeta.
“Miramos al futuro con ilusión y con la certeza de que esta nueva etapa nos hará más fuertes, más globales y, sobre todo, más fieles a La Fórmula de nuestra esencia”, concluye Montse Martí.
