En el marco del 24º Congreso Nacional de Hospitales y Gestión Sanitaria organizado por la Sociedad Española de Directivos de la Salud (SEDISA), expertos del ámbito sanitario público y privado debatieron sobre el presente y futuro de las terapias avanzadas en España. El simposio titulado "El futuro de las terapias avanzadas en España: Innovación, Acceso y Acción" sirvió como antesala a la inminente publicación del nuevo plan nacional para el abordaje de estas terapias por parte del Ministerio de Sanidad.
Durante el encuentro se presentó el documento de consenso "Retos y oportunidades en la era de las terapias avanzadas en España", elaborado por el Consorci de Salut i Social de Catalunya (CSC) con la colaboración de Pierre Fabre y la participación de expertos de distintas comunidades autónomas. El texto identifica seis retos clave que condicionan la implementación efectiva de estos tratamientos.
La sesión estuvo moderada por el Dr. José Luis Poveda, gerente del Hospital La Fe de Valencia, y contó con la participación de representantes del Ministerio de Sanidad, servicios autonómicos de salud, la industria farmacéutica y entidades de gestión sanitaria. Entre los puntos destacados del debate figuraron la necesidad de estandarizar protocolos de acceso, optimizar los procesos de evaluación y financiación, y reforzar la formación específica del personal sanitario.
El consenso general fue que la colaboración público-privada es fundamental para garantizar tanto el acceso temprano a estas terapias como la sostenibilidad del sistema sanitario. En este sentido, Josep M. Guiu, director de Farmacia del CSC, subrayó la importancia de una visión estratégica que permita adaptar la normativa, gestionar el impacto económico y facilitar la reorganización estructural necesaria. Advirtió además que sin estos elementos “la innovación podría no llegar a estar disponible para los pacientes”.
Desde la industria, Álvaro Roca, director de Market Access and Public Affairs en Pierre Fabre, destacó la necesidad de un enfoque coordinado y sostenible que asegure la equidad territorial en el acceso a las nuevas terapias. Asimismo, recalcó que, aunque es fundamental un marco general común, también se requiere un enfoque individualizado para cada terapia avanzada.
El documento presentado recoge seis desafíos prioritarios para el desarrollo e integración de estas terapias: mejorar o crear nuevos modelos de evaluación, optimizar el proceso de financiación, garantizar la sostenibilidad financiera, adaptar el marco normativo, agilizar los procesos regulatorios y reducir la inequidad territorial en el acceso a estos tratamientos.
El simposio sirvió así como un espacio clave de reflexión y alineamiento estratégico entre los distintos agentes del sistema sanitario ante un campo que está redefiniendo el futuro de la medicina.