Esta enfermedad se caracteriza por el daño progresivo de los conductos biliares del hígado, los encargados de transportar la bilis desde este órgano hasta el duodeno. Al no realizar esta función adecuadamente, la bilis se acumula en el hígado provocando inflamación, que con el tiempo puede progresar a fibrosis, cirrosis, cáncer de hígado e incluso a la necesidad de un trasplante hepático o la muerte. Nueve de cada diez afectadas por esta enfermedad son mujeres, a las que el diagnóstico suele llegarles en plena edad productiva y reproductiva: entre los 35 y los 60 años.
Una persona con CBP puede tener la misma esperanza y calidad de vida que una persona sana, si se diagnostica pronto y recibe a tiempo un tratamiento adecuado. Sin embargo, y aunque la CBP es la enfermedad colestásica del hígado más común, solo el 6% de la población la reconoce y sabría definirla y, por eso, la Asociación para la lucha contra las enfermedades biliares inflamatorias (ALBI) ha puesto en marcha la campaña “Cambia el color. Reinterpreta la CBP”, que está avalada por la Asociación Española para el Estudio del Hígado (AEEH).
El objetivo de esta iniciativa es que la sociedad conozca y se conciencie sobre la CBP y que sepa que esta enfermedad puede detenerse sin progresar a cirrosis si se detecta y se trata a tiempo. La CBP ya no tiene por qué asociarse al color amarillento de la piel, debido al aumento de la bilirrubina en la sangre. ¡Queremos desterrar para siempre este color de la CBP! Por eso, hemos montado una gran carpa en la que cambiaremos el color de los clásicos emoticonos amarillos, que a partir de hoy serán rosas, verdes, azules y naranjas. Durante la acción, además de ayudarnos a pintar la CBP de otro color, podrás contar con el testimonio de pacientes en diferentes fases de la enfermedad.
