En palabras de Juan Arenas, asesor médico de eucerin, “la dermatitis atópica sigue creciendo año tras año, el 90% ciento la experimenta antes de los cinco años. Esta enfermedad causa graves trastornos en las familias, ya que el picor es muy molesto y los padres llegan a desesperarse ante la incomodidad que sienten sus hijos. Por eso desde Eucerin hemos querido acercarnos a todas esas personas para darles la información que necesitan, hábitos de higiene, consejos diarios de cómo mejorar los síntomas etc. Una información que ellos agradecen porque en muchas ocasiones se encuentran perdidos”.
La dermatitis atópica (DA) es una enfermedad crónica es decir, que puede durar años. Aparece en niños y adultos con una piel especialmente sensible, lo que a menudo significa que el paciente tendrá épocas mejores o peores, dependiendo del clima, la época del año, el estado de hidratación de su piel. La DA causa irritación e inflamación de la piel. Los síntomas son piel seca, escamosa y con picor y generalmente afecta las partes internas de los codos, detrás de las rodillas, piernas, brazos y la cara, pero también puede cubrir la mayor parte del cuerpo.
La DA no es contagiosa y normalmente es hereditaria. Un hijo con un padre con piel atópica tiene una de cuatro probabilidades de tener alguna forma de enfermedad atópica. Hasta un cinco por ciento de la población adulta y entre un 10% y un 20% de niños en el mundo padecen esta enfermedad.
La contaminación -especialmente en las ciudades-, la higiene excesiva con uso de jabones, la dureza del agua, etc., son factores que pueden influir en la aparición y en los brotes de esta enfermedad, pero también cuando se expone la piel a factores irritantes como: disolventes, químicos, industriales, detergentes, humo de tabaco, pinturas, blanqueadores, lanas, comidas acidas, y/o astringentes, y otros productos del cuidado de la piel que contienen alcohol (algunos jabones y perfumes).
Además, se sabe que la barrera protectora de la piel en estos pacientes está alterada por lo que no ejerce su función. En esta barrera intervienen ingredientes que se sabe que están ausentes en esta patología (ácidos grasos esenciales o ceramidas como el ácido linoléico –Omega 6, o bien, en algunos casos, una proteína de la piel, como es la filagrina). Con la llegada del otoño la DA tiende a empeorar apareciendo brotes agudos. Los brotes se caracterizan por una sequedad muy acusada de la piel y un picor intenso que motiva que el paciente se rasque y se produzca lesiones que pueden infectarse.
